El Laboratorio Digital
El laboratorio digital es el presente y futuro en el mundo de la fotografía, y lo encontramos en el corazón del ordenador y más concretamente en las aplicaciones de edición de imágenes. Este tipo de programas nos abren un amplio abanico de posibilidades a la hora de trabajar con imágenes, para ajustar, corregir, crear efectos, manipular de múltiples maneras o realizar fotomontajes; y además optimizar y preparar la fotografía, para diferentes salidas o propósitos. Todo ello de una forma limpia, inmediata y casi sin la posibilidad de equivocarse, y teniendo como único límite, la creatividad.
HERRAMIENTAS: Para comenzar a describir la funcionalidad de una aplicación de edición, primero veremos sus principales herramientas. Existen herramientas de selección, que permiten delimitar las áreas de imagen a editar, y también una “varita mágica” que selecciona bajo un rango de color definido. Se puede trabajar con herramientas de dibujo y pintura como pincel, lápiz aerógrafo, o crear degradados. Cuentan con utensilios de corrección de exposición, enfoque, o para clonar una parte de la imagen; todo ello con una lupa de ampliación, que permite trabajar con más detalle.
REENCUADRAR: Una de la tareas más comunes que podemos realizar, es el reencuadre de una imagen. A veces al visionar una fotografía que hemos realizado, nos encontramos con una composición poco acertada, donde hemos recogido algún elemento indeseado, o bien que no respeta el nivel horizontal normal. Utilizando la herramienta de recortar, podemos delimitar el nuevo encuadre, y posteriormente girar la selección hasta conseguir el ángulo que corrija la inclinación defectuosa. Una vez encontrada la nueva composición, sólo tenemos que aplicar el recorte.
AJUSTES DE COLOR: Otra de las labores que con más frecuencia realizaremos en un programa de edición, es la corrección de dominancias de color que pueden afectar a una imagen. Muchas veces en el proceso de captación o digitalización de una fotografía, se cometen errores en la calibración del color, que varian los valores cromáticos originales. En la aplicación podemos partir de una imagen negativa y conseguir con la función de inversión, su versión positiva. Por medio de los ajustes de color u otras herramientas similares, podemos afinar y reestablecer los colores naturales de la fotografía.
AJUSTE DE BRILLO Y CONTRASTE: Igualmente que en el caso anterior, otro de los ajustes que con más frecuencia nos encontraremos, es modificar el brillo y contraste de una fotografía. Una imagen debe contener un equilibrio natural de las zonas claras, tonos medios y zonas oscuras. Cuando tenemos una fotografía apagada, es necesario modificar sus niveles de tonos, que se pueden equilibrar ajustando su histograma (Representación gráfica de tonos) en el menú -Niveles-, o aumentando los valores de brillo y contraste, hasta que la imagen recupere las luces y sombras naturales.
RETOQUE DE IMÁGENES: El software de tratamiento de imágenes, nos permite realizar con limpieza labores que por otros procedimientos, serían más complicadas. Cuando una fotografía está deteriorada o manchada y necesitamos llevar a cabo una trabajo de restauración, tenemos varias herramientas que nos ayudan a recuperar su apariencia original. Podemos utilizar filtros digitales que se encargan de limpiar la imagen, también recurrir a la herramienta de tampón para clonar porciones de imagen o seleccionar zonas de color semejante, duplicarlas y pegarlas sobre el área a restaurar.
VIRADO DE TONOS: Existen otro tipos de técnicas que se han aplicado desde los primeros tiempos de la fotografía, como son los virados de tonos de color, que podemos realizar en nuestro ordenador de forma eficaz y sencilla. Se han creado filtros digitales que aplican el tono que queremos utilizar, a la imagen tratada. Otra forma alternativa es utilizar duotonos o tritonos para crear la gama de tonos de color, que reemplace la escala de grises de la fotografía. El único requisito es crear una gama tonal, que respete los niveles de la imagen original.
COLOREADO DE IMÁGENES: Además de los virados de tono, podemos colorear una imagen de escala de grises, pintando o aplicando selectivamente zonas de color. Una opción consiste en colorear la imagen con algunas de las herramientas de dibujo y pintura, convenientemente aplicadas. Otra forma es hacer selecciones de las diferentes zonas que queremos colorear y por medio de la función de ajustes de color, ir aplicando a sombras, medios tonos y zonas claras los diferentes tonos, que consigan aportar a la fotografía, de una apariencia natural y equilibrada.
FILTROS DIGITALES: Unas de las incorporaciones más relevantes de los programas de edición de imagen, son los filtros digitales. Por medio de estos filtros conseguimos de forma inmediata, aplicar gran variedad de efectos sobre las imágenes. Se pueden aplicar distorsiones, conseguir diferentes tratamientos gráficos o artísticos, obtener variadas texturas, mejorar el enfoque o usar la imagen desenfocada como en el ejemplo representado, para crear un efecto de foco suave. Con el filtro digital de desenfoque hemos sustituido al filtro óptico, que tradicionalmente se ha utilizado en fotografía.
FILTROS DIGITALES (ENFOQUE): Un filtro digital contrario es el de enfoque. En muchas ocasiones podemos observar que después de escanear una imagen o de aplicar determinados tratamientos, ésta pierde su nitidez original. Para solucionar el defecto se suelen utilizar los filtros de enfoque, que en diferentes graduaciones consiguen reestablecer el aspecto y nitidez de nuestra fotografía. Como con la mayoría de los filtros deberemos aplicarlo con cuidado, ya que usarlo de forma indebida, puede provocar un defecto opuesto, que modifique la calidad general de la imagen.
TRATAMIENTOS ARTÍSTICOS: También los filtros digitales nos permiten cambiar el aspecto de una imagen, con diferentes tratamientos que imitan la técnica y el trazo de otras disciplinas artísticas, como el dibujo o la pintura. Con la utilización de esta categoría de filtros, podemos conseguir con habilidad, transformar una imagen fotográfica, emulando técnicas de dibujo a lápiz, trabajos a plumilla, pastel, lograr la apariencia de una acuarela o de un cuadro al óleo; y crear de una forma sencilla, una nueva versión artística de nuestras fotografías.
TRATAMIENTOS GRÁFICOS: De igual manera tenemos la posibilidad de crear otros efectos gráficos, como la posterización o separación de tonos, una técnica ya utilizada en la fotografía tradicional, teniendo la ventaja que al utilizar recursos digitales el proceso es inmediato y de absoluto control sobre el resultado. También podemos aplicar a la imagen, diferentes tipos de tramas y texturas, con las que experimentar y crear variaciones gráficas de nuestras fotografías, o lograr los acabados de diversas técnicas de fotomecánica.
CAPAS: Una de las categorías donde los programas de tratamiento de imagen, han cobrado gran importancia, es en el terreno del fotomontaje. Con las herramientas que aportan, podemos crear infinidad de imágenes imposibles, o costosas de conseguir por otros medios. Por la manera que se estructuran las aplicaciones, podemos superponer diferentes capas de imágenes y combinarlas en múltiples modos. Cada capa se puede editar con independencia de las demás, y al final del proceso de montaje, combinarlas en una capa única.
FOTOMONTAJES: Para realizar un fotomontaje tendremos las imágenes que van a integrar la composición, preparadas según las necesidades. Podemos ir haciendo las selecciones en las zonas, donde queremos pegar o incrustar los distintos elementos de la imagen, en la disposición prevista. Tendremos elementos de imagen recortados, para que se combinen de forma precisa, o bien iremos aplicando el tratamiento necesario, hasta lograr que poco a poco el fotomontaje adquiera la apariencia preconcebida, con la ayuda de las herramientas, funciones, capas y filtros del programa.
IMPRESIÓN: Una vez acabado el proceso de edición de las imágenes, una de las posibles salidas es su impresión. Además de las diferentes tecnologías de las impresoras, existentes varios soportes de impresión, que van desde el papel en múltiples acabados y gramajes, hasta la impresión en otros soportes como telas. Igualmente el tamaño de imagen a imprimir puede variar, desde el DIN A4 que se consigue con una impresora convencional, hasta llegar a imprimir imágenes de varios metros en impresoras de gran formato.
ÁLBUMES DIGITALES: Otro de las posibilidades es elaborar álbumes digitales que a modo de presentación visual, se puedan mostrar en un ordenador o en un televisor convencional. Existen programas informáticos que nos permiten catalogar y editar presentaciones de nuestras imágenes, e incluso añadir textos, gráficos y música; para posteriormente grabarlas en diferentes formatos CD, DVD, PHOTO-CD o en archivos que se puedan utilizar en dispositivos portátiles. Disponiendo de esta forma de colecciones digitales de nuestras fotografías, para visualizar de una manera diferente y atractiva.