El
estaño tiene usos ampliamente difundidos e interviene
en centenares de procesos industriales.
En forma de película,
se usa como revestimiento protector del cobre,
del hierro y de los
diversos metales usados en la fabricación de latas
de conserva, aunque dada la facilidad con que se ataca
por algunos ácidos resulta no apto para la elaboración
de muchas frutas y otros alimentos.
Se utiliza para
disminuir la fragilidad del vidrio, en el estañado de
hilos conductores y, aleado con niobio,
en la preparación de semiconductores.
Los compuestos
de estaño se usan para fungicidas, tintes, dentífricos
(SnF2 ) y pigmentos.
Se utiliza en
la preparación de importantes aleaciones como bronce
(el estaño y cobre) y metal de tipografía (estaño,
plomo y antimonio).
Se usa también,
en aleación con el titanio,
en la industria aeroespacial y como ingrediente en algunos
insecticidas.
El sulfuro estánnico,
conocido también como mosaico de oro,
se usa en forma de polvo para dar aspecto metálico
a objetos de madera o de resina. |