"Ojos
que no ven, corazón que no siente". Las
percepción que tenemos de las cosas nos da una idea del mundo,
tomamos por real y existente aquello que vemos e incluso, como señala
la frase inicial, se despierta más fácilmente la emoción
si va acompañada del estímulo visual y en su ausencia
se puede adormecer o desvanecer.
En esta sección veremos ciertos casos que muestran cómo
algunos se han servido del conocimiento psicológico de la percepción
para la manipulación, el engaño e incluso la tortura.
En
los algunos regímenes totalitarios, cuando una persona y sus
ideas dejaron de considerarse "correctas" porque discrepaban
de las únicas oficialmente admitidas, no sólo se les
asesinó a ellos, sino que se procedió a una "limpieza"
total de todo el rastro vital que pudieran haber dejado. Cuando alguien
es eliminado físicamente de algún modo pervive en el
recuerdo, en las palabras que pronunció, en su imagen fotográfica,...
Por eso pretendían borrar toda huella de su paso por este mundo,
para matarle doblemente; no sólo no existía ahora, NUNCA
había existido.
Esta perversa técnica se vale del recurso de romper el círculo
entre la percepción y la memoria. Ejemplos pueden darse muchos,
en esta sección sólo mostramos algún caso que
pueda dar una idea de esta manipulación ideológica,
que quizá alcanzó sus más terribles cotas en
la Camboya de los jemeres rojos.
El
"Centro Andaluz de la Fotografía" exhibió en marzo
de 2003 la muestra Stalinfagia: El devorador de imágenes,
con una selección de más de 100 fotografías en blanco y negro de
la colección de David King, sin duda el mayor archivo mundial de
fotografías, pósters y pinturas manipuladas de la era soviética.
El escritor e historiador fotográfico comenzó su colección durante
un viaje que realizó a Rusia en 1970. Allí pudo comprobar la pérdida
de miles de imágenes de las víctimas del régimen soviético y, con
frecuencia, la deliberada manipulación de la memoria gráfica de
la historia política y social de la URSS desde el triunfo de la
revolución bolchevique en 1917.
La exposición reproduce, entre otras muchas obras, una serie de
fotografías de un libro del que se habían eliminado con tinta china
los rostros de aquellos sujetos que por su pretendida disidencia
habían sido purgados por el todopoderoso Stalin o sus hombres de
confianza. Era una consecuencia más de la ley que obligaba a sus
propietarios a censurar sus propios libros.
Tomado
de El País, Cultura 24-02-2003
Pon
el puntero en la imagen para descubrir quién es el
disidente eliminado + información
Enlaces
recomendados con otros ejemplos de Franco y la guerra de Irak: anigp-tv
Para la manipulación de imágenes en el fotoperiodismo consultad también: Caretas
Muy reciente (16-oct-2006) en el periodista digital encontramos esta imagen acompañada del texto que transcribimos bajo ella:
"Con Franco también pasaba.- Antes de que existieran los programas de tratamiento de imágenes, los fotógrafos hacían lo que podían con el afamado truco del corta y pega, como lo demuestran dos nuevas fotografías trucadas de la entrevista celebrada entre Franco y Hitler en Hendaya (Francia) en 1940." (En la Portada de Tecnología del 16/10/2006)
NOTA NUESTRA: Este artículo y otros que aparecieron este día -incluso en la TV- como primicia informativa, no eran tal, pues ya consta esta información al menos desde 2003, fecha de la página de anigp-tv que figura arriba.